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Sección Segunda
TFPs acciones conjuntas en el ambito internacional
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1989 Cuba: finalmente puedo hablar El Profesor Plinio Corrêa de Oliveira da a conocer al público brasileño —por las páginas del "Jornal de Brasilia" del 16 de junio— un importante documento sobre la trágica situación reinante en Cuba, que reproduce la carta de tres eminentes prelados de aquella desafortunada nación, hoy exiliados en los Estados Unidos, dirigida al Cardenal Paulo Evaristo Arns, Arzobispo de São Paulo. Por su actualidad y trascendencia, las TFPs lo distribuyen ampliamente en sus respectivos países. A continuación lo transcribimos en su integridad.
"Cuba
padece desde hace 30 años una cruel y
Causó un desconcierto general en Brasil la carta que S.E. el Cardenal Arns, Arzobispo de São Paulo, envió al comandante Fidel Castro con ocasión del trigésimo aniversario de la victoria de la revolución comunista en Cuba. En efecto, no se comprende cómo la implantación de un régimen político y socioeconómico abiertamente comunista, que hasta hoy permanece sin ninguno de los astutos maquillajes gorbachevianos, y que, por lo tanto, está en contradicción frontal con la doctrina católica tradicional, pueda ser saludada por el príncipe de la Iglesia con las felicitaciones y los elogios de que es pródiga la misiva del Purpurado al comandante. Es igualmente incomprensible que S. E. haya presentado la realidad de los hechos en Cuba, con colores tan disonantes de lo que la opinión mundial tiene por verídico en lo que se refiere a puntos esenciales como la libertad religiosa, la miseria popular y el carácter policíaco de la ya vetusta dictadura cubana. Sin embargo, mientras se erguía un concierto de protestas contra la referida carta, preferi callarme. Pues en materias como ésta la voz de los hechos es de evidente importancia. Y esta voz solo cabía ser levantada, a través de las tubas de la gran publicidad, por aquellas personas que hubiesen visitado con imparcialidad la Isla-Prisión o que tengan acceso próximo, vivo y continuo a lo que allá sucede. Ahora bien, con desconcierto aún mayor para mí, los ecos de esas voces hasta aquí no me habían llegado. Y sobre ellas se mantenían mudas —tanto cuanto yo sepa— las agencias noticiosas internacionales.
El Cardenal Arns, Arzobispo de São Paulo, llama al tirano de las Antillas “Queridisimo Fidel” en su carta de diciembre de 1988 transcrita con júbilo por el periódico “Granma” del PC cubano. En la foto, el Purpurado a la derecha del “comandante” Ortega de Nicaragua Esa omisión de los principales interesados en la materia, es decir, los propios cubanos, me redujo al silencio. Pues, ¿que hacer en beneficio de hermanos en la Fe que no se defienden a sí mismos? También en relación a ellos me vino al espíritu la frase de San Agustín que mencioné en un reciente artículo para referirme a los brasileños indolentes: "Qui creavit te sine te, non salvabit te sine te", o sea, Dios que te creó sin tu concurso, no te salvará sin tu concurso (Aviso a los indolentes, "Folha de S. Paulo, 8-5-1989). Mas, al fin, cesó mi doloroso desconcierto. En efecto, recibí del siempre bien informado y dinámico TFP Washington Bureau, dirigido por mi querido amigo Mario Navarro da Costa, autorizadas y abundantes declaraciones de origen cubano, propias para esclarecer al público brasileño acerca de la triste realidad existente en la bendita Isla, que tuvo por Pastor máximo en el siglo XIX al gran San Antonio María Claret y cuya hermosura risueña fue celebrada por nuestro siglo, durante décadas, llamándola Perla de las Antillas. Miami, la metrópoli de la península de Florida, está situada a una distancia de 125 kms. de Cuba, siendo así el punto del territorio norteamericano más cercano a la isla. Por eso se tornó la atracción de todos los desdichados cubanos que consiguieron escapar de la vigilancia castrista. Y ellos han sido tan numerosos que, con el tiempo, transformaron a Miami en una ciudad bilingüe, donde se habla igualmente el español y el inglés. Son también bilingües los medios de comunicación social. Entre los que utilizan el español se destaca el "Diario Las Américas". Pues bien, fue en las páginas de ese cotidiano, del 11 de mayo pasado, donde encontramos un documento de gran importancia. Se trata de una carta abierta dirigida al Cardenal Arns por tres obispos cubanos residentes en el exilio y como tales capacitados para hablar con una libertad de la cual no gozan los obispos auténticamente católicos que residen en países comunistas. En la misiva desarrollan de modo respetuoso, pero también evangélicamente franco, toda la argumentación apropiada para esclarecer al público sobre cuánto dista de la realidad de los hechos la descripción que el Purpurado brasileño hace de la libertad religiosa y civil, así como de la situación económica en que se encuentra el pueblo de la Isla. Es un documento que nadie debe ignorar. Por falta de espacio, dejo de publicar otro testimonio altamente elucidativo, distribuido en forma de volante a la población de Miami. Está firmado por más de cien notabilidades cubanas en el exilio y contiene una comedida pero franca manifestación de desacuerdo con la carta enviada por el Cardenal Arns al comandante. Es este el texto de la carta abierta de los tres obispos cubanos (la división en subtítulos es mía): 1. Por qué esta carta pública 9 de Mayo de 1989 Emmo. Sr. Cardenal Paulo Evaristo Arns. O.F.M. Arzobispo de São Paulo, Brasil Eminentísimo Sr. Cardenal Arns: Nos dirigimos a Su Eminencia en forma pública por dos razones principales: primero porque el motivo que nos lleva a escribir esta carta es de orden público, habiéndose publicado en la prensa nacional e internacional y segundo porque habiéndole escrito primeramente en forma privada no hemos recibido respuesta, después de haber esperado un plazo de tiempo razonable. Nuestras anteriores cartas a Su Eminencia están fechadas en Enero 16 (Mons. Boza Masvidal) y Febrero 23 (Mons. Román y Mons. San Pedro) del corriente. 2. El "Sr. Castro, dictador vitalício de Cuba" durante treinta años El objetivo de la presente es su mensaje de Navidad al Sr. Castro, dictador vitalicio de Cuba, con ocasión de los 30 años de haber tomado el poder. No vamos a repetir lo que le dijimos en nuestra correspondencia privada aunque sí nos permitimos hacer un resumen de los puntos principales que tocamos en la misma. 3. Exitos "muy relativos" y "demasiado onerosos" Le decíamos que sería muy largo exponer toda la situación del país en cuanto a discriminación, falta de libertad religiosa, etc., señalábamos el carácter discutible de las conquistas y de los logros porque, por una parte se hacen con costo ético y espiritual demasiado alto, y por otra parte porque son muy relativos (carta de Mons. Boza Masvidal). 4. Dictadura militar cruel, represiva y policíaca También le recordamos que Cuba padece desde hace 30 años una cruel y represiva dictadura militar en un estado policíaco que viola o suprime constante e institucionalmente los derechos fundamentales de la persona humana. Y entre otras pruebas de esta situación mencionábamos las aventuras militares del castrismo que han costado millones de dólares al pueblo cubano y miles de víctimas a su juventud (carta de Mons. Román y Mons. San Pedro). 5. Negada la aserción del Cardenal Arns sobre la deuda externa cubana Sería muy largo el comentar punto por punto todas sus aserciones en el mencionado mensaje, pero estimamos necesario el señalar algunas de las más extraordinarias. Estima Su Eminencia que "hoy día Cuba puede sentirse orgullosa de ser en nuestro continente, tan empobrecido por la deuda externa, un ejemplo de justicia social". No queremos hacerle decir lo que no dice, pero leyendo esta frase podría pensarse que Cuba no está como el resto del continente, empobrecida por la deuda externa. Estamos seguros de que Su Eminencia sabe que Cuba tiene una enorme deuda externa no sólo con los países occidentales, sino igualmente con los países comunistas; según los últimos datos a nuestra disposición esta deuda aproximadamente asciende a la cifra de 5.500 millones de dólares. 6. Beneficios opulentos para un pequeño grupo de privilegiados — El pueblo en la miseria En cuanto a la justicia social de la que Su Eminencia afirma que Cuba es ejemplo en nuestro continente, deseamos recordarle que mientras un número bastante reducido de jerarcas del gobierno disfrutan de todas las comodidades de la vida el pueblo se ve reducido a nivel de sobrevivencia. Eminencia, algunos de nosotros hemos estado, en un pasado reciente en Cuba, no para discutir de cómo cocinar camarones y langostas con "e1 comandante" (ver Fidel e a Religião. Conversas con Frei Betto, pgs. 28-29, 33-34), sino para convivir con nuestro pueblo y compartir con él su angustia y su dolor. 7. Población reducida a "una sujeción total equivalente a la minoría de edad" Estamos seguros de que Su Eminencia no desea para su querido Brasil una situación en la que un número reducidísimo retenga irreversiblemente todo el poder político y económico del que abusa para su propio provecho y para perpetuarse en el poder, mientras la población en general es mantenida en una situación de sujeción total equivalente a una minoría de edad. Pregúntele, por favor, Sr. Cardenal, a sus amigos que visitan a Cuba y se codean con los personajes de la dictadura si han visto alguna vez a alguno de ellos esperando pacientemente con la libreta de racionamiento en la mano para poder comprar una libra de carne cada nueve días o dos camisas al año, como el resto de la población. 8. Una lección de Pablo VI Dice a continuación Su Emìnencia que "la fe cristiana descubre en las conquistas de la revolución las señales del reino de Dios que se manifiesta en nuestros corazones y en las estructuras que permiten hacer de la convivencia política una obra de amor". No sabemos por qué al leer estas frases nos vienen a la mente aquellas otras de Pablo VI en las que afirma que "La Iglesia... rechaza la substitución del anuncio del reino por la proclamación de las liberaciones humanas, y proclama también que su contribución a la liberación no sería completa si descuidara anunciar la salvación en Jesucristo. (Ella)... no identifica nunca liberación humana y salvación en Jesucristo, porque sabe... que no es suficiente instaurar la liberación, crear el bienestar y el desarrollo para que llegue el reino de Dios" (Evangelli Nuntiandi, N°s 34 y 35). 9. "Obra de amor" cristiano, de la cual un millón de cubanos huyó dispavorido Por otra parte, afirmar que las estructuras vigentes en Cuba "permiten hacer de la convivencia política una obra de amor" es desconocer totalmente la realidad cubana. Si fuera como dice Su Eminencia ¿porqué se debe considerar delictivo el tratar de escapar de esa "convivencia política" que se califica aquí como "obra de amor" ?, ¿por qué en un país como Cuba, que apenas si tenía emigración, ha visto en los 30 años de la dictadura castrista un millón de sus ciudadanos abandonar el país? ¿Por qué en el breve espacio de cinco meses, en 1980, 125.000 personas se lanzaron a las costas floridianas en un éxodo incontrolable? ¿Qué deberíamos pensar, Sr. Cardenal, si en cinco meses, 1.100.000 brasileños buscasen refugio en Chile? 10. Rechazadas por el Sr. Cardenal Arns las informaciones ofrecidas por los tres Sres. obispos cubanos Creemos, Sr. Cardenal, que es víctima de su bondad y buen corazón. Su Eminencia no conoce a Cuba sino a través del testimonio de otras personas de su confianza. No nos corresponde a nosotros el expresar aquí una opinión sobre la intención de esas personas o el conocimiento que las mismas puedan tener de la extrañeza ante el silencio de Su Eminencia a nuestra oferta fraternal, como hermanos en el episcopado, de poner a su disposición otros aspectos de la situación en Cuba que por lo visto Su Eminencia ignora. 11. La falta de libertad religiosa "disminuye en números absolutos" las vocaciones sacerdotales y religiosas y la "asistencia a la Misa dominical" Uno de estos aspectos que podría preocupar a Su Eminencia es la falta de libertad religiosa en Cuba que afecta especialmente a los católicos. Esta falta de libertad, cuyos detalles podríamos ofrecer a Su Eminencia cuando gustase, se refleja trágicamente en las estadísticas religiosas; Cuba es el único país entre sus hermanos del Caribe y probablemente de la América Latina en general, que en los últimos 30 años ha visto disminuir en cifras absolutas el número de católicos, sacerdotes, religiosos y seminaristas, así como la asistencia a la Misa dominical. 12. Una información que no corresponde a los hechos La reciente polémica suscitada por su mensaje navideño es una prueba evidente de lo que estamos diciendo. Su Eminencia ha podido contestar y hacer todas las declaraciones públicas que ha creído oportuno hacer, tanto en su patria como en el extranjero. Que sepamos, los obispos de Cuba por su parte, han mantenido su acostumbrado silencio. La prensa le ha atribuido la afirmación de que el mensaje, que pretendía ser confidencial y privado, se hizo público solamente después que el Sr. Arzobispo de La Habana dio su asentimiento. Nos consta el testimonio de personas completamente fidedignas que esa afirmación no corresponde a los hechos. Eminencia, no dudamos de su veracidad, pero pensamos que una vez más ha sido víctina de su confianza y credulidad confiando en terceras personas. 13. Tomando como base la exhortación apostólica Evangelii Nuntiandi A propósito de esta libertad religiosa nos atrevemos una vez más a citar la exhortación apostólica Evangelii Nuntiandi: "De esta justa liberación, vinculada a la evangelización, que trata de lograr estructuras que salvaguarden la libertad humana, no se puede separar la necesidad de asegurar todos los derechos fundamentales del hombre, entre los cuales la libertad religiosa ocupa un puesto de primera importancia" (Evangelii Nuntiandi, N° 39). 14. Dios aparte de Brasil la trágica experiencia cubana Queremos concluir reiterándole el deseo que le expresamos en nuestra correspondencia privada: "Dios quiera que su país nunca tenga que pasar por la tragica experiencia por la que nosotros estamos atravesando". Señor Cardenal, Paz y Bien
Mons.
Eduardo Boza Masvidal
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